El factor humano en las relaciones

Hay que saber crear momentos humanos en las relaciones para conseguir vínculos sólidos.

Y todas las relaciones requieren sentido y mantenimiento.

Te contamos aquí cómo el Talento Afectivo enseña a las personas a relacionarse con las personas.

Más sensibilidad en tu vida social

Las habilidades sociales sin sensibilidad humana no crean los lazos claves que dan autenticidad a la relación para que sea a la larga fructífera.

Y ese componente humano en un trato cercano con las personas no se logra con formaciones online; requiere un entorno colectivo y presencial para sentirlo si se quiere realmente avanzar.

La intuición, los sentidos, la escucha profunda, la expresión cálida, la hospitalidad hacia el otro; todos son recursos genuinos que están dentro de ti y que puedes aplicar en el ámbito social y familiar.

Ese radar emocional también te ayuda a explorar tu propia relación con las imperfecciones de la vida y desde ahí te impulsa a ser vital y renovarte para que puedas evolucionar.

«Un talento genuino que confluye con la esencia de lo más humano.»

Más interior en tu vida afectiva

Vivimos un mundo ultra conectado, pero demasiado urgente y nuestra vida se vuelve fría y frágil.

El Talento Afectivo hace llegar a la gente a lo esencial: a sí mismo y a su vida afectiva.

En la vida de pareja hace falta algo más que inteligencias para crear vínculos estables; cuando surgen las dificultades se requiere un talento más perseverante, más personal y más sensual.

El saber compartir, es otro vínculo para crecer en el amor. Y muchas personas dan por hecho que comparten, cuando a menudo tanto parejas como solteros, no se conocen en los esencial y no comparten algo que sea realmente fruto de los dos.

Abordamos las claves del ciclo Yo – Amor – Convivencia y entonces podrás enriquecer mejor tu vida afectiva.

Ven a descubrir lo importante de distinguir Amor y Convivencia.

Más riqueza en tus respuestas

Siempre hay dos respuestas dentro de ti; una que siente (Espontánea) y otra que construye (Reflexiva); no se contradicen, simplemente no hablan de lo mismo. Una percibe y la otra transforma. Y las dos son necesarias para fortalecer los vínculos.

Pero a menudo, uno no avanza en sus relaciones por usar demasiado el mismo tipo de respuesta y olvidarse de la otra, y entonces el vínculo se empobrece.

Si te apetece aprender cómo mejorar tus vínculos en tus relaciones tanto para tu vida como para tu trabajo, ven a conocernos y mira qué cursos te interesan más.

¡Te vamos a sorprender!